Bravissimo

La violencia es el miedo a los ideales de los demás

El 19 de abril de 1810 despertó a una provincia que estaba dormida



Hace 200 años ocurrió un hecho inédito en la historia de lo que hoy se conoce como Venezuela. Y es que aquel jueves 19 de abril de 1810 marcó el origen de la nación moderna. Hoy se celebra el Bicentenario de aquella gesta histórica que, según historiadores, ha sido tergiversada a través del tiempo.

Arlene Urdaneta, investigadora del Centro de Estudios Históricos de la Universidad del Zulia (LUZ), puntualiza que hasta el presente prevalece una visión política y militar a partir de los sucesos ocurridos en Caracas, donde el resto del territorio queda relegado a comentarios circunstanciales. De allí que los créditos de constituir la República de Venezuela y de impulsar la nueva nación sean concedidos a un sector limitado de la sociedad venezolana.

Según la también profesora de LUZ, los avances en los estudios regionales permiten ofrecer una interpretación más amplia, dinámica y justa de la coyuntura independentista al considerar desde la diversidad sus alcances e importancia en la definición territorial de la nación moderna. Con seguridad, explica que a partir del 19 de abril de 1810 se revelaron los disímiles intereses locales y las capacidades de negociación de los distintos colectivos sociales regionales.

A su criterio se une Julio Portillo, presidente de la Academia de Historia del Zulia, quien recalca la importancia de la fecha. Con seguridad, el historiador enfatiza que se trata de una fiesta originada por el pueblo y no por militares. Destaca que de 200 años que Venezuela tiene de Independencia, 160 corresponden a gobiernos militares y 40 a civiles.

“La ciudadanía debe entender que aquel importante momento lo llevaron adelante los civiles y no los militares como se pretende creer. En nuestra historia tenemos 160 años de gobierno militar y 40 de civiles. Eso explica un poco el atraso que nos caracteriza”.

Aprovechar la ocasión

Un conflicto entre España y Francia fue la excusa perfecta para que Venezuela emprendiera el proceso de Independencia. A inicios del siglo XIX, en los provincias que formaban parte de la Capitanía General de Venezuela se hicieron sentir los problemas existentes en el seno de la monarquía española que para el momento estaba debilitada por la falta de mando, la crisis económica consecuencia de las guerras que durante años libraba con territorios vecinos, el malestar social manifestado en las insurrecciones ocurridas en la península.

Portillo manifiesta que en 1808 la situación tomó un rumbo dramático al ser invadida España por las tropas del emperador Napoleón Bonaparte, quien destituyó al rey legítimo e impuso como monarca a su hermano José Bonaparte. En repuesta a esta situación, en 1810 en la península se constituyó una Junta Suprema y en los territorios hispanos comenzaron a formarse juntas de gobierno en apoyo a Fernando VII, el rey destituido.

La noticia llegó a lo que es hoy Caracas. Desde entonces, una pregunta rondó en la mente de la clase alta de la sociedad: ¿Somos una colonia francesa o española? Era su momento para separarse de la monarquía española y optar por mejores cargos. “Los blancos criollos, que eran la máxima autoridad, no podían llegar a ser capitanes generales, administradores, ni jueces, entonces dicen por qué. ¿Hasta cuándo vamos a seguir dependiendo de España?”. Aquí se desencadena la razón política que originó el movimiento.

Jóvenes notables caraqueños convocaron al pueblo para consultar el apoyo o no al Gobierno. En cabildo abierto, don Vicente Emparan, capitán General, preguntaba: “¿Quieren que los gobierne y continúe en el mando de estas provincias?”. En repuesta, el pueblo gritó ¡No!, a lo que respondió: “Pues yo tampoco quiero mando”. Luego de esto, quedó establecida la que oficialmente recibió el nombre de Junta Suprema Conservadora de los Derechos de Fernando VII.

Firma especial

El mismo 19 de abril de 1810 fue redactada el acta en la que se consignaba un nuevo gobierno, donde el gobernador y capitán general, el intendente de Ejército y Real Hacienda, el subinspector de artillería y el auditor de Guerra y asesor general, así como la Real Audiencia, quedaban privados del mando que ejercían, a la vez que suprimían esas instituciones.

En consecuencia, el Cabildo de Caracas, con sus dos alcaldes José de Llamozas y Martín Tovar y Ponte a la cabeza, asumió el poder, incorporando en su seno a los representantes del clero, del pueblo, mientras que el mando militar era confiado momentáneamente al teniente coronel Nicolás de Castro y al capitán Juan Pablo Ayala.

El acta del 19 de abril fue firmada por todos los asistentes al Cabildo extraordinario de ese día, incluyendo a los funcionarios españoles depuestos (Vicente Emparan), los que desempeñaron un papel secundario y los que a partir de ese momento asumieron el poder.

La noticia de lo ocurrido en Caracas llegó a Maracaibo a través de Coro. Los argumentos para justificar la negativa del cabildo de apoyar a Caracas fueron, en palabras de los actores de la época, hechos injustos y nada dignos de su imitación, además de una rebelión contra la soberanía que sólo aspiraba deponer las potestades legítimas establecidas por el soberano o su representación y reasumir en sí la autoridad suprema, haciéndose preferente frente a las demás provincias y mutilando con violencia el magnífico cuerpo de que somos parte integrante.

Fiesta por el Bicentenario


Cristina Kirchner, presidenta de Argentina, participará hoy en los festejos del Bicentenario de la Independencia de Venezuela y se reunirá con su homólogo venezolano Hugo Chávez, según informaron fuentes oficiales el pasado viernes.

Kirchner participará junto a otros jefes de Estado y de Gobierno de América Latina, el Caribe, Asia y África de las ceremonias que incluyen una sesión especial de la Asamblea Nacional y un desfile cívico-militar encabezado por Chávez. Ambos jefes de estado se encontrarán en el Panteón Nacional.

El encuentro servirá para que ambos presidentes analicen las relaciones bilaterales y los acuerdos de cooperación en marcha. Chávez y Kirchner se reunieron en diciembre en Buenos Aires, donde firmaron varios acuerdos en materia de turismo, construcción y energía hidráulica.

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